La tercera edad no tiene porqué significar aislamiento social. Las personas mayores disfrutan de estar junto a personas de su misma edad y con la que compartan intereses, de ahí la importancia de fomentar y promover que participen en actividades.
Los centros de día son una opción adaptable y cercana para la atención de los más mayores, manteniendo, en caso de que la tengan, la convivencia con la familia.
Son muchos los beneficios de asistir a un centro de día, tanto para el usuario como también para los cuidadores y/o la familia.
Beneficios para la persona mayor
No está sola. Los centros de día son un lugar donde las personas mayores crean vínculos y relaciones sociales de amistad con personas de su edad. Esto tiene mucha importancia en la prevención del deterioro cognitivo, en su estado anímico y en su calidad de vida.
Se mantiene más activa. En los centros de día se trabaja la motricidad, la capacidad cognitiva y la psicoestimulación, a través de diversas actividades: talleres de memoria, de terapia ocupacional, etc.
Se encuentra en un entorno seguro. El centro de día es también un ambiente seguro y agradable en el que las personas mayores pueden pasar el día.
Está rodeada de profesionales que van llevando a cabo un seguimiento de su evolución. De esta manera es más fácil detectar cualquier anomalía en su comportamiento que pueda ser el indicio de una nueva enfermedad, de deterioro físico, etc.
Duerme en casa. Los centros de día son la solución ideal para las personas que quieren seguir viviendo en su hogar sin renunciar a las actividades terapéuticas que se realizan en los centros residenciales.
Beneficios para los cuidadores
Descanso para el cuidador. A menudo, cuidar de una persona mayor no es fácil, especialmente cuando requiere atención las veintidós horas del día. Esto se agrava en casos como los enfermos de Alzheimer. En casos como este los centros de día y las residencias son muy beneficiosos, pero es muy importante acudir a este recurso antes de que el cuidador caiga en la depresión o agote físicamente.
Higiene personal. Los centros de día suelen contar con este servicio, que facilita el mantenimiento de los hábitos de higiene para las personas mayores, especialmente para aquellas que tienen cierto grado de dependencia y que no cuentan con una vivienda suficientemente adaptado.
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